La digitalización del SNS, prioridad inaplazable para los pacientes

REDACCIÓN.- La digitalización del Sistema Nacional de Salud es una prioridad inaplazable para los pacientes. También, para garantizar una mayor efectividad en los modelos asistenciales y de prevención, mejorando la eficiencia, la sostenibilidad del SNS y su calidad de vida. Estas han sido algunas de las conclusiones vertidas por los expertos en el XIV Foro de Salud organizado por el Centro de Estudios de Políticas Públicas y Gobierno de la Universidad de Alcalá (CEPPyG), celebrado en el Parlamento de Islas Baleares.

Este foro, dirigido a políticos en activo de las distintas Comunidades Autónomas, coincide con la temática expuesta recientemente por el Observatorio Economía y Salud Boehringer Ingelheim del CEPPyG que, a través de su informe “La digitalización del Sistema Nacional de Salud”, identifica los retos y las oportunidades que debe afrontar el SNS para su proceso de transformación digital.

En este contexto, el Centro ha reunido a expertos (nacionales e internacionales) en diversos ámbitos como gestión hospitalaria, asistencial, seguros, educación y pacientes, entre otros, para analizar en profundidad cómo la digitalización ha contribuido al control de la pandemia.

Estas prioridades se reflejan en el “Plan Nacional de Recuperación, Transformación y Resiliencia” presentado por el Gobierno, que destinará en torno al 33% de los fondos Next Generation EU a la digitalización, fruto del cambio que ha impulsado la pandemia de la COVID-19, hasta el punto de evidenciarse una revolución digital en el sector.

“La digitalización del SNS no debe centrarse, únicamente, en una disminución de la presión asistencial presencial, sino producir una atención de más calidad, basada en un control más preciso de la evolución de la patología, y ofrecer una respuesta más rápida y eficaz que, en último extremo, incremente la calidad de vida y reduzca las hospitalizaciones y riesgos asociados”, así lo ha afirmado ha afirmado Jesús María Fernández, fundador y director de la start up sanitaria Hiris Innovation Technologies.

La pandemia ha puesto sobre la mesa fortalezas y debilidades de nuestro sistema sanitarios, “sin duda uno de los mejores del mundo en calidad, equidad, universidad y eficiencia. Pero con áreas de mejora notables, entre las que se encuentra apostar por las tecnologías digitales y reorientar el modelo asistencial mejorando la atención de los pacientes con patologías crónicas”, ha resaltado Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Enfermería. “Es necesario un cambio de modelo, priorizando la promoción de la salud y la prevención de la enfermedad, pasando de un modelo reactivo a uno proactivo, con una especial atención a los pacientes con patologías crónicas -los que más necesitan el sistema sanitario- apostando por la atención familiar y comunitaria, donde las enfermeras y enfermeros tienen un papel protagonista como profesional sanitario de referencia (especialistas), y donde la promoción de hábitos de vida saludable en la población, la educación sanitaria y para la salud sean prioritarias dentro del modelo asistencial y de cuidados, este cambio de enfoque supone invertir en el nivel primario de atención, y esto a la larga puede optimizar enormemente los costes del SNS y hacerlo más eficiente y sostenible”, ha añadido Ayuso.

Retos

Entre los retos de transformación digital en el ámbito de la salud destaca, con especial intensidad, la gestión de la patología crónica para los que la digitalización del SNS resulta una prioridad inaplazable. Estos pacientes presentan un abordaje atomizado por especialidades y diversos niveles de atención. “Deben potenciarse aquellas actividades que, potencialmente, puedan desarrollarse vía telemática. Esto generaría información valiosa para un mejor manejo del paciente, por parte de los profesionales sanitarios involucrados en su abordaje, además de incluirle en la toma de decisiones”, ha asegurado María Dolores Rubio, directora-gerente del Hospital Universitario Príncipe de Asturias.

Por su parte, Carmen Mateo, directora del CEPPyG, ha resaltado la importancia de que la innovación y la sanidad vayan de la mano. “A pesar de las dificultades que supone todo cambio, debemos mantener el rumbo fijo: abrir el sistema a la infinidad de posibilidades que ofrecen las nuevas herramientas de tratamiento inteligente de la información sanitaria. El Centro de Estudios siempre apostará por este tipo de iniciativas que permiten acercar las últimas tendencias a la sociedad”, ha recalcado.

El presidente del Parlamento, Vicenç Thomas i Mulet, ha destacado la labor que realiza el Centro de Estudios en materia de educación. “Gracias al análisis ofrecido durante el XIV Foro de Sanidad sobre las políticas desarrolladas, estoy convencido de que sus conclusiones serán útiles para afrontar uno de los retos que ha visibilizado la pandemia: La transformación digital en el ámbito de la salud”

Más enfermeras

Además, durante su intervención, Diego Ayuso, secretario general del Consejo General de Enfermería ha querido resaltar que “el déficit de enfermeras en nuestro país es algo que veníamos denunciando desde el CGE desde hace muchos años, y que la pandemia lo ha hecho patente. El ratio de enfermeras por población en España es de 5,9 enfermeras por 1.000 habitantes, estando en la cola de los países de la Unión Europea donde la media se sitúa en 8,6 enfermeras por cada 1.000 habitantes y en atención primaria este déficit se hace más manifiesto con una enfermera por cada 2.000-2.500 ciudadanos frente a una enfermera por cada 1.000 en la media de la UE”. Algo muy a tener en cuenta, pues, a su juicio, «en la transformación digital de la asistencia las enfermeras deben tener un gran protagonismo».

El caso de Dinamarca

Dinamarca es el tercer país de la Unión Europea con un mayor porcentaje de digitalización de su sistema nacional de salud, de hecho, se trata de un largo proyecto en el que llevan trabajando más de 25 años. Esto les ha permitido contar con un sistema integrado, unificado y seguro, que les facilita, a día de hoy, tener un seguimiento del paciente de forma pormenorizada.

Lisbeth Nielsen, directora general de la The Danish Health Data Authority, organismo dependiente del Ministerio de Salud del gobierno danés, ha explicado en detalle como este avance en el tratamiento de la información les ha permitido una mayor organización y coordinación ante la crisis de la COVID-19. “Los ciudadanos daneses tienen la posibilidad, a través de su teléfono móvil, de concertar citas para la realización de test, recibir los resultados directamente en su teléfono, y reservar las citas para vacunarse en los centros próximos a su localización. Esto ha permitido un seguimiento exhaustivo de la pandemia en nuestro país”.

Asimismo, Nielsen ha destacado como el alto nivel de digitalización de la información sanitaria en Dinamarca les ha permitido identificar procesos críticos en el sistema (riesgos, debilidades, etc.), prevenir ciberataques a través de la encriptación de los datos en la red, tener un mejor control de incidentes y emergencias, o descubrir estándares de seguridad en la arquitectura de la información. “No se trata únicamente de digitalizar la información o los procesos, es un cambio cultural”, ha subrayado la directora.

“Hay que apostar por las tecnologías digitales, el modelo sanitario precisa que incorporemos de forma efectiva la telemedicina y los telecuidados, que sea posible hacer un seguimiento correcto de los pacientes con patologías crónicas en sus domicilios, potenciar la atención domiciliaria mediante estas tecnológicas como complemento de la atención directa y personalizada, no sustituyéndola. La atención primaria de salud y sus profesionales deben ser proactivos, no reactivos y las tecnologías digitales pueden acercar mucho los pacientes a los profesionales de la salud, facilitando el control y seguimiento de los pacientes, utilizando tecnologías que permitan la monitorización de parámetros como la glucemia, la presión arterial, la saturación de oxígeno, la vigilancia de heridas, el control de la adhesión a tratamientos,etc., facilitando la relación paciente-profesional sanitario, mejorando la calidad asistencial y esto hoy en día esta escasamente desarrollado”, ha resaltado el secretario general del Consejo General de Enfermería. “Todo esto supone invertir, la inversión en sanidad debe alcanzar la media de los países de la UE 9,6% de gasto sanitario frente a PIB, España se encuentra en el 8,8% (publico + privado). Esta inversión debe dedicarse a una mayor apuesta por la AP (15% del gasto sanitario frente a PIB en España y en la media de la UE supone entre el 20-25%) y en inversión en tecnológicas digitales, como la teleasistencia o la historia clínica electrónica unificada”, ha finalizado.